miércoles, 27 de agosto de 2008

En Entrega





Entregado a tu amor estoy, en alas

pájaro polícromo desprendido de la bandada

del caos retumbante miserable, entregado


con pureza frágil, en miga de pan para picotear,


blanco o mejor, transparente y desnudo (sin nudo)


sinuoso y dúctil para la paciencia practicada


del píar que llama enfoguecido su hembra, en el aire




Entregado y suspendido flotante, lleno de azules


celestes cual cielos intensos durante las nubes


expeditivas y viajeras entrelazadas y untadas


como bocas entregadas a la noche tierna por


oscura en ese pequeño foquito que alcanza


palpar el mínimo tacto de este amor


no resbaloso, sí firme y afirmado


en la entrega, mi entregado a tu piel


de estrella, luna y eclipse, de astro


y big bang, de origen y raíz expansiva


con rumbo arriba y cuello erguido vamos


trepantes de peldaños no visitados por nadie,



que entregado a vos como lo estoy yo,


solamente hay como vos entregada a mi.

lunes, 25 de agosto de 2008

Nuestros Nombres






Tan íntimamente y explícitamente mía,


sin pudores, tan en la mirada y diseminado


por el viento y cualquier aire


donde pasa un tiempo que no tiene existir, mía,


la mujer tierna surcada por sinuosidades


y remolinos del agua, tan mía y en verdor


como árbol que me otorga su savia y sudor.



Tan viendo el mundo por el reflejo cristal de tus lagos,


tus bajantes aguas de todos los meses, tu amor


de oxígeno, de planeta y galaxia, de mundo tuyo


que deseo, para mi, como cuando dentro tu cuerpo


brujos nosotros, nos hacemos el amor y


arrimo mi alma al centro de tu existencia,


de tu verbo carne y adjetivo: tu nombre


que es mi nombre herrado en la piel, inscripto


y drenado en la sangre,


y mi pulso y ritmo inscribiendo ese tu nombre


en mi espacio, tiempo y territorio.



Tan tu piel clara y oscura, pliegue del lugar


bajo tus ojos donde tanto discurre hondanadas


de vuelo a los meridianos universales y nuestros,


y también tan agua y pez para el entre


tus piernas navegantes ellas y yo, conquistados


por lenguas colonizantes de corazones


sin guerras.



Así, yo tan tuyo vos tan mía,


construimos luz diurna, trigo y semillas


para el pan del pecho nuestros


tan lindante a los labios.



Así, cada día


un tanto más,


soy un tanto tuyo


y vos un tanto mía.

miércoles, 20 de agosto de 2008

Hombre y Mujer






Cuero, vela y ansiedad de la semilla


recién puesta sobre húmeda la tierra


esperando frondosas copas, puesta ser


sombra y refugio del transeúnte sólo,


pero también del que va del brazo ajeno a bañarse


por pasos, sombras debajo de los pies


en caminos húmedos, de tierra.



Y después;



Yo, tu hombre sin conjugaciones vestidas,


desnudo tu hombre, llenándome las palmas


del nombre tuyo, mujer desnuda, mi mujer


de nudos arrastrados, preñada de amor, mi mujer


por yo este hombre embarazado en tu mirada,


pariendo los hijos de mi poesía a través de tu boca.



Tronco, madera, dureza y las líneas de la corteza


enmarcando en actitud luminaria un centro, brote


y raíz: esencia y fe no prestidigitada sino genuina,


en el ritmo y pulso marcado en manos


de parche repicado esperando veranos que


por el amplio surco de línea y universo


nos otorguemos también a la tierra en deseo.



Y después;



Mi hembra y cachorra de la luna y la lluvia,


mi mujer, y yo acá tu hombre y cahorro, puesto


en zapatos y espalda dispuesta y derecha o recta


para vos alimetarnos de lo fresco y límpido del mundo,


donde yo tu hombre y vos mi mujer


nos envolvemos sin enlazarnos.


martes, 19 de agosto de 2008

A Cerca del Miedo






Toda su vacuidad, su poder estrépito y atormentador


para hacerse invisible y colarse por las figuras conocidas


como si fuese un nudo que desliza en la soga


a la manera de la corbata: peso denso sobre el cuello


angustia indómita manchada sin lenguaje;


y sobre todo tan traidor: cuando rasguña por detrás


mientras uno anda verdeando por la vida.



Algo bueno tendrá supongo, quiero decir, el miedo,


quizás el abrir los ojos, de ese sacudón conmover


la realidad para mirarse los pelos de los pies y decir:


"ah, yo estoy acá, mirame y me miro"


un doblez de la conciencia, saber el estado etílico


o de veneno que surca por dentro.



Endiablado y persistente en actitud mosca oscura


timorato, estúpido timorato


(¿yo o el pronombre de la primera persona?)


agotante, chirriante, entumecedor ágil


que los días y mañanas densifica dolorosamente.



Ningún deseo más fuerte y estruendoso


que el de reventarlo


con un impulso viajero desde mi corazón.



lunes, 18 de agosto de 2008

Fin de semana en soledad para Jacinto y Lucille





(Lucille y Jacinto están sentados en el sillón de la casa de Ella. Jacinto prepara fuerzas y le dice algo)


j: nena, no sabés lo que encontré...


l: pará, no me digás así que me asustás!


j: bueno, no sé, cómo querés que te diga?


l: bueno, dale decime...


j: hay dos pasajes en micro al lado del televisor...


l: y?


j: cómo y? se van...


l: no, mentira, mentira, mentira.. no nos van a dejar acá...


j: yo en un bolso no entro, y aunque entrase me niego a ir apretujado en un bolso. A mi si me llevan, que me llevan en brazos o no voy nada...


l: cómo sabés que son de ellos los pasajes?


j: y de quién van a ser?


l: no sé, nene, de otros, de fueradefoco? o del violoncelista?


j: si ellos no salen de acá... aparte, adónde van a ir?


l: qué sé yo, fueradefoco el otro día me contó que el violoncelista tenía un concierto, iba a interpretar a ¿quién era? uno que empieza con B, Balt, Bam...


j: ¿Bach?


l: si, si, ese... como el de la canción que escuchaba Ella el otro día, "Juan Sebastián..."


j: bueno, pará, a ver... Ey, fueradefoco!


(fueradefoco se acerca rápido junto al violoncelista que lo sigue)


f: qué pasa? (a el Violoncelista) Che! pará un poquito que no escucho...


(el violoncelista lo mira molesto, pero deja de tocar)


(a Jacinto y Lucille) si?


j: mirá, ahí arriba de la mesa... ¿ves?


f: si, ¿qué?


j: hay dos papeles que dicen Lulumar...


f: ajá ¿qué pasa Jacinto?


j: vos sabés algo de que ellos se van de viaje?


f: cómo que se van? de verdad me decís?


j: no sé, no sé, sino qué van a ser esos pasajes?


f: (al violoncelista) escuchaste? se van! podemos hacer una fiesta!!


l: no, qué fiesta tonto, quién nos va a cuidar?


f: yo estoy grande, me las arreglo..


j: bueno, bueno, paren. Hacé una cosa, porque no te acercás y te fijás qué dicen los pasajes?


f: Ahí voy...


(fueradefoco, hábilmente como siempre se dirige a la mesa donde se encuentra el televisor para recopilar la información inscripta en los pasajes)


l: yo no sé que voy a hacer... es muy triste..


j: lo raro es que no nos hayan dicho nada...


l: y si desde que se conocieron, andan perdidos como en una nube, todo el día a los besitos y qué sé yo... mirá a plasti y lina, cada día están más solos pobres...


j: pero el otro día se sacaron fotos con nosotros...


l: si, porque él las quiere poner para exhibirnos en ese escritorio que tiene allá en páginas amarillas...


j: bueno, no digas exhibir, suena feo...


l: es así, nene...


(fueradefoco vuelve bailando y sonriendo)


f: se van a las toninas


l: las tonitas, qué es eso?


j: es un pecesito, creo...


l: qué raro... pará, y cómo sabés que son de ellos


f: confirmadísimo, dice sus nombres


l: no puede ser, no puede ser y no puede ser....


f: ya mismo me pongo a armar guirnaldas, hay una chica de la casa vecina que me encanta... (al violoncelista) vos, dejá de tocar a Bach, y preparame un bolerón, algo para conquistarla tipo.. no sé, "Piel Canela"..


(fueradefoco se va cantando "Me importás tú, y tú, y tú, y nadie más que tú...")


j: bueno, nena, tranquila ya van a volver... serán unos días nada más...


l: no me importa, me pone triste y punto...


j: si, a mi también pero...


l: encima Él que se va siempre, se va corriendo a no sé dónde con la musiquita y qué sé yo...


(Jacinto la abraza a Lucille y la consuela. Luego, se levanta y agarra una galletita y se la ofrece. Lucille lo mira tierna)


l: gracias nenito


j: te quiero


l: yo también.

Preguntas para una Vuelta






¿cómo se regresa?



cuatro amaneceres luminosos enredado


en tu pelo, en las manchas de tu cuero,


en tus puntos marrones: guías de mis manos,


cuatro amaneceres son muy poco,


porque todo es poco, aunque sea mucho,


sobre todo si son esos amaneceres.



¿cómo se regresa?



cuatro anocheceres al pie de tu mirada vitreaux,


en tu voz contemplativa, dulce, honda, pacífica,


en tu gesto femenino de amor: mi devoción,


cuatro anocheceres son pocas lunas redondas,


para este hambre que tengo de tu sueño,


de tu intimidad, de tus rinconcitos.



¿cómo se regresa?



del mar que nos miraba besarnos, con ojos


de espuma orillesca, de los perros amigos


que nos enviaba la arena para enlazarnos


en la caricia de la luz y la sombra de un segundo,


¿cómo?


del besarte a antojo y destajo, del nombrarte


por tus orejas y el abrigarte por la sonrisa,


de la risa fácil, la inventiva,


de todo ese mundo.



¿cómo se regresa?



viernes, 15 de agosto de 2008

Enlace Durante






En ese dormitando transcurre también el mundo


por el vínculo inmediato, la línea sinuosa


que dibujan nuestros cuerpos:


el túnel enmarcado por donde pasan barcos y caballos,


un transcurrir en que mutamos ríos de papel


y velas sensibles al soplo del viento.



En ese doble nudo de los cuerpos


mitad en el tiempo y mitad fuera de él


como si relojes fuesen incógnitas, sólo hipótesis,


en ese doble ser-estar tan verbal como táctil


(líneas recíprocas como frontones golpeados por


pelotitas de goma)


la realidad discurre en el goce indeterminado


de la viscera tierna amante.



y nos palpamos como animales tiernos y fáciles,


fascinados y en trinos nos palpamos como animales


y somos ciegos entregados al mínimo temblor de tierra


esperando una abalancha esdrújula que fulmine


desde el fondo de un adentro


y también, somos el centro de una galaxia como sol


su color más puramente condensado de intocable



En esos huecos que hundimos en los materiales


en que exprimimos naranjas y también las semillas


con sombras tan humanas como mitológicas,


ahí, ahí en esos huecos tenemos los dobleces


como los tienen los espejos y los relieves reflectantes


como el río que te mira para verse a sí mismo.



En esa dádiva dulce donde somos construimos


más que esas y esos, más que dedos y doces


y doblegamos de vuelta las formas, las desafiamos


para unirnos sin demases ni mareos


en estas tantas noches preciosas noches.





miércoles, 13 de agosto de 2008

caBo





Con esa boca ella besa, con esa boca


besos generosos con esa boca generosa,


besa con esa boca ella, me besa, besame besos


de desierto y agua de cactus u oasis:



[quiero paradoja en la palabra,


desvincularla de la línea recta]



Con esa boca llena ella besa mis manos,


esa boca que habla y dice "perrito", "mamá", "amor",


la misma boca esa que palpa los matices y


que [roza] los [bordes] rojos de mis estertores

[rosa] [bordó]

[policromidad]

[lábil]



Con esa boca no llana ella me besa, con esa boca


y yo con mi boca usurpante de la tuya


susurro algunas palabras al aire que me llamen,


me nombren y me aseguren que en la tierra somos



[para perderme y encontrarme simultáneo


en tu boca, esa boca]






martes, 12 de agosto de 2008

Esta Orquesta





El sonido, el timbre de tu voz pronunciante


altera mi devenir a un nomeimporta.



y me florecen faunas y floras


inéditas para cualquier libro de botánica


como también para mi autogalaxia


panorámica paralelográmica



la gotita de tu gesto en el decir con hilitos


que no se ven: los fueradecampos



son en verdad mis mañanas pastizales y selvas,


mis vaquitas mugientes alimentantes


y mis noches relojeras de errancia


por lo sensorial que habita del recuerdo en mi cuerpo



la corchea azul enunciada sin pentagrama


después de descorchar con la boca una borrachera de amor



es mi estado etílico, mi entrada gloriosa y luminosa


a la discontinuidad del tiempo, mi forma fractal


pero con tanto centro y arco perceptivo


en ese pequeñito silencio que pide luz en el medio de tu cuerpo



la onomatopeya firme descifrada y leída al corazón


expresada sin pudor y con descaro primaveral



la alucinación auditiva en mis momentos de soledad


el repiqueteo de tu nombre sobre las líneas de mi mano



Creo que tengo la orquesta más maravillosa del mundo


interpretando un conjunto de canciones


que son una maravilla











lunes, 11 de agosto de 2008

Dientes






No tengo límite, no tengo freno: soy tren


sin maquinista ni nada,


no detengo, no puedo, no quiero,


por las vías voy sin control, derrapando


en las curvas para chirriar el sonido del metal.



Soy un salvaje, un animalito: un perro.


No pienso, habito las coordenadas del instinto reflejo,


me acoplo sin control, me revuelvo por un puñado de prendas


el aire se me agita, la respiración entrecorta,


me reúno con la naturaleza en lo que tiene ella de primitivo.



Y en la sangre,


redoblo la apuesta,


que voy a comerte toda.

domingo, 10 de agosto de 2008

Sobre la Paranoia





I


Siempre fui tan íntimo de la paranoia


como si esta fuese mi escucha


durante los insomnios



II


La mirada, el ojo con láser: la paranoia


y también Dios desde arriba controlador,


como la poli, el híbrido gendarme (gen. de. arma.),


y la militarización del ser humano,


la necesidad de control y ser controlado:


tal vez una herencia de la más tierna infancia


a la que algunos responden agasajados descorchando un brindis


y otros repudian, no sin la ambivalencia de aquellas cosas


que nos marcan desde el chupete y la crianza


y que entonces hacen zig zag con ese peso en el alma


que generan las contradicciones.


También paranoia en,


el mito del Gran Hermano fraternal, hermanito (justo 1984),


la moda: los carteles publicitarios con hombres y mujeres del tamaño de un barco


que nos miran por ejemplo desde lo alto en la avenida Córdoba


con esos ojos siempre verdes maquillados y de una lucidez inexistente;


y también el internet, que generosa conecta los pueblos


pero también fulgura identidades y las crea en filos delgados de realidad y ficción.



III


Siempre fue así, la calle me observaba


con miles de ojos que brotaban de las baldosas,


y en esos momentos la gente emitían sonidos


con sus bocas que poca relación guardaban con


un mensaje limpio y guardado;


los animales eran de una carcinería


genuinamente desbocada


y las mujeres, de una perfidia incontrolable.



IV


Paranoico en todos lados: el lugar


más cercano y más alejado del magnetismo


de lo oculto y recóndito: las emociones.











jueves, 7 de agosto de 2008

Arquitectos de un Espacio sin Techo





En ese espacio .que también era tiempo


porque ¿qué es el espacio sin el tiempo?.


en ese espacio, construido el espacio, con aire


en la nariz, con brotes de corazones parecidos


a camas elásticas, a santas aguas frescas, las aguas


de un torrente que hacen rimas para canciones


que embellecen, ese espacio inabarcable en los ojos,


tan poco corrupto ese espacio, de la magnitud de


una naturaleza pariendo de a pares pechos hinchados


de palabras, ese espacio inocente de tan inaugural y


con el carácter del pan de una mañana, que iza el color


sobre el cielo: el espacio.




En ese espacio, no había techo porque no había,


no estaba por un antojo no diseñado, como un libro


verde que pronto predispone sus hojas. No había


techo: era una intemperie que a ellos gusta, la estrella


llegando a cenar para luego hacer el amor y perder


frío siendo desnuda, pero no había un techo porque


siempre subían escalones o peldaños, que tampoco


había como techos que no habían, y la vista era un nene


extasiado brillando cada parte de sus ojos, alegrías, como


regalos que eran como no tener techo, porque no había


limites rocas y sí que había ganas de que sobre la libertad


sobre un cielo: sin techo.



Y así iban, como arquitectos desquiciados que en todo lo que


construían se proponían de antemano no tener techo


sino un espacio, una enormidad de salón para deslizarse


en una danza tan antigua y genuina basada en la carcajada.

Visita a la Oficina






El está sentado en su escritorio, en su oficina. Allí trabajan unas treinta o cuarenta personas. Cada una con su computadora, con su escritorio. Escucha unas canciones que Ella le pasó por mail. Son hermosas canciones.
Ella camina por una calle. Está en la esquina del trabajo de El. Sube las escaleras que trepan hasta la puerta de entrada del edificio amarillo. No está sola, la acompañan Lucille, Jacinto, Fueradefoco, el Violoncelista, Plasti y Lina.

f: che, adónde vamos? alguien sabe?

l: y, ella debe saber

j: qué es este edificio?

l: no sé... "Páginas Amarillas" dice ahí

l: y qué son las páginas amarillas?

f: es una biblioteca de libros amarillos?

l: (a Jacinto con ojos brillando) ai, te imaginás nene? todos los libros que escribió el sol juntos...

p: lo terrible es que no es eso

(lo miran a plasti con gesto expectante)

esta es una empresa que hace unos libros que se llaman guías...

(silencio)

en las guías la gente pone avisos ofreciendo servicios, productos...

l: y vos cómo sabés todo eso?

p: ella tiene una en su casa..

j: nunca la vi

p: es que está tirada por ahí... una vez la usó. No se acuerdan la vez que quedó encerrada y no podía salir?

(Lucille se empieza a reir a carajadas)

p: bueno, ahí la usó... de qué te reis?

l: nada, nada.. es que me acuerdo..

(Jacinto la mira sonríendo)


Entran todos al edificio. Se encuentran con un guardia de seguridad.

- Venimos a ver a...

- Ah, si, si. Vos debes ser...

- Si, soy yo...

- Pasen. Sabés cómo llegar?

- Lo busco, quedate tranquilo...

Caminan un pasillo, doblan a la izquierda y se embarcan por una oficina hasta que llegan a una enorme oficina. Desde lejos ella lo divisa a él detrás de su computadora. Gesticula con los auriculares puestos.
La gente los mira extrañados. No saben quién es y siempre que en ese lugar aparece alguien que no se sabe quién es, se lo mira raro.

- Hola (mientras camina hacia él)

El se para de su asiento y camina hacia ella. Sonríe sorprendido.

- Hola! (la abraza y la besa)... viniste con todos! qué lindos! Vení, vamos a presentarlos...

Abanzan todos ellos, escritorio por escritorio presentando a Lucille, Jacinto, Fueradefoco, el Violoncelista, Plati y Lina.
Todos se reúnen alrededor de ellos. El Violoncelista se enstusiasma con el público y empieza a entonar una canción del renacimiento italiano.

Señora 1: ai! Pero qué lindo toca!

(una jóven sonríe)

Señora 2: Son de ustedes?

- Si, claro...

Señora 1: y cuánto tienen?

(Ella frunce el seño y pregunta): No sé, vos te acordás?

- No, la verdad que no..

La señora 1 pone gesto exclamativo que transmite al resto de señoras que son como siete.

Señora 1: cómo no saben cuánto tienen? qué barbaridad...

(Ella lo mira él sonriendo. Empieza a comprender en qué tipo de lugar está)

- Nena (al oído) y si las dejamos que se diviertan con ellos mientras...

(ella asiente despacio y mirando provocativa)

Ellos se deslizan por un pasillo, luego por otro, y luego por otro. Encuentran un rinconcito y ahí empiezan a besarse.
Mientras las señoras bailan las canciones del Violoncelista que se siente sumamente reconfortado.

l: es lindo páginas amarillas...

j: si, la verdad que si... la gente se divierte...

l: mirá como bailan plasti y lina... no querés bailar?

j: Si!

Y bailan todos juntos hasta que tengan que volver a sus escritorios y poner la misma cara que ponen todos los días de lunes a viernes.

martes, 5 de agosto de 2008

Días





Para no olvidarme que la escritura,


las palabras, las melodías


las canciones y todo eso


es lo que me permite


salir a jugar.



Para no olvidarme sobre todo,


en los días solos, los días tristes


esos días serios y reflexivos,


que tengo el mundo para devorar.



lunes, 4 de agosto de 2008

Honda






Por un cordón de algodón, negro, blanco, amarillo


me deslizo hasta la punta de un hemisferio redondo


y sin contemplaciones repto en una mirada lunar


para comerte, lamerte y luego brindarte un color



quiero tenerte azúcar por mis órbitas abiertas, mis comisuras abiertas


de par, te celo en silencio sórdido, te presiento todas las mañanas



Dicen rápido algunos veloz y yo en mi fragilidad cerámica


me hago medio mandarina para desgajarme mirándote


Dicen tiernos algunos, enamorados y yo en mi mano segura


te tomo lúdica, no tímida y en tu eje de rotación telúrica



quiero caballos, para vos, lluvias de inmensos ventanales en el corazón


brillos partidos de los costados del sol, inundándote los pechos de amor



y que te rías en una carcajada, suave arena


y conmigo entres al mar.


domingo, 3 de agosto de 2008

Diálogo en tono poético entre Lucille, Jacinto, Fueradefoco, el Violoncelista, el Enamorado (1) y la Enamorada (2)





Son las 9 de la mañana. Lucille duerme abrazada a Jacinto sobre un sillón de color pastel y de textura amena. De repente ella abre un ojo y luego el otro.



L: Ey, che... Nene, despertate. Mirá.


J: qué?


L: parece que está re lindo el día...


j: si no se ve nada...


l: si mirás por las rendijas de la ventana se ve luz... y es amarilla


j: es verdad.... y ellos? dónde están?


l: creo que duermen...


j: y; ayer se quedaron como hasta las 6 de la mañana..


l: si, yo me quedé dormida mientras hablaban


j: debe ser sábado porque sino ella a las 7 viene a preparar café..


l: si, si, es sábado. Lo escuché ayer en el noticiero


j: estuvo linda la charla?


l: Si estuvo linda (se queda pensativa) por lo general son así... lástima que ahora tenemos que esperar a que se despierten...


j: y si los despertamos?


l: cómo?


j: ah, no sé... pero el otro día fueradefoco y el viloncelista los despertaron...


l: mentira nene, no te creo


j: te juro, preguntales...


Fueradefoco viene bailando una danza extraña al son de una melodía que el violoncelista toca con pasión gestual. Lucille y Jacinto lo llaman.


f: hola Lucille! (mientras baila), hola jacinto!


l y j: hola!... hola sr. violoncelista


f: no te va a contestar. Cuando toca de esa manera no habla.


l: qué caras graciosas que pone


f: mejor que no te escuche... cómo andan?


j: bien. Queríamos ver la luz del día que parece estar lindo. Hay luz amarilla.


l: es verdad que el otro día ustedes los despertaron? pueden hacer eso?


f: si, fuimos con el sr. violoncelista y tocamos el oso mientras yo salticaba la parte que dice "vuelvo al bosque, y estoy contento de verdad, la, la, la la la la".


(lucille se ríe tapándose la boca y jacinto la mira)


j: y pueden hacerlo de nuevo?


f: sólo si los enamorados nos dejan pasar...


j: y por qué no los van a dejar pasar?


f: porque los enamorados guardan el sueño de ellos..


l: ahhhhhh (con boca grande y sorprendida)


j: qué linda sos cuando decís "ahhhhh"


f: pero podemos intentar, el otro día pudimos pasar tocándoles un tema de Sergio Dalma...


j: ah, entonces te dejan pasar si les tocás un tema que les gusta?


f: no, no, escucharon la canción, se abrazaron y se quedaron mirándose y ahí aprovechamos para pasar. Vamos a ver qué podemos hacer hoy.


(Fueradefoco y el Violoncelista van hasta el umbral del pasillo donde los enamorados están sentados conversando)


e1: adónde van?


f: al baño, mi amigo necesita pasar a lavarse los dedos que se los lastimó tocando...


e1: no, no, no. No pueden pasar el otro día pasaron y los despertaron.


f: nosotros no fuimos los que los despertamos


e2: Si! yo escuché cómo cantaban "el oso"


f: era él que la cantaba, no éramos nosotros.


e2: lo dudo, vos no tenés la voz tan grave. Y aparte él canta la versión de Fito y yo te escuche a vos con la de Moris.


f: y si les cantamos una canción?


e2: de ninguna manera


(e1 la mira a e2 como pidiéndole que los deje hacer una canción)


e2: no ves que nos van a engañar de nuevo?


e1: (susurrandole a e2) dale, dale, dale, dale...


e2: bueno, bueno. Qué van a tocar?


f: qué quieren? mi amigo sabe todo repertorio, desde música barroca hasta música sinfónica


e1: mmmmmm... "Te quiero tanto" la de Sergio Denis...


(e2 lo mira con los ojos entrecerrados. El violoncelista empieza a interpretar el tema. Los enamorados empiezan a cantar y bailar entre ellos y fueradefoco y el violoncelista aprovechan la distracción para pasar.

Llegan hasta el cuarto y trepan a la cama a través del acolchado que tiene la punta sobre el piso)


- "Yo vivía en el bosque muy contento, caminaba......" Más fuerte toca que yo bailo..


(ella abre los ojos, lo mira a él a su costado. Lo besa en la mejilla y él abre despacio los ojos, la ve, le sonríe y le devuelve el beso)


- Buen día, preciosa


- Buen día, corazón.




viernes, 1 de agosto de 2008

Dioses y Animales






Con mis ocho brazos te aferro acuática


en un mar arremolinado de dedos


para mojarte


.yo pulpo - yo rana.


.vos océano - vos laguna.


Con tus ocho brazos me abrazás aéreo


en un cielo pintado de rosa


para endurecerme


.vos pulpa voladora - vos ave infinita.


.yo firmamento - yo atmosfera.


Con los ocho brazos nos estrujamos terrestres


en una tierra barrosa y húmeda


para hundirnos en un intenso adentro


.nosotros pulpos terrestres - nosotros hormigas.


.nosotros suelo - nosotros realidad.




Uno que es un dios

sale de una puerta del cielo


interpela a otro con un silbido y le dice:


- Viejo, allá abajo hay dos que se creen de ocho brazos


- No digás


- De verdad


- Estarán enamorados...


- Seguro. Se creen pulpos, ranas, océanos...


- Chicos naturales...


- Si. Te confieso algo?


- qué?


- Me parecen hermosos.


- Me imagino.


- De verdad te digo, me enternecen.


- Les vas a regalar algo?


- Si, un eclipsen para el 16.


- Qué lindo sos


- Yo no, ellos. Lo van a saber disfrutar.