domingo, 24 de mayo de 2009

Bicho Bolita





Y cada vez que repunto, que veo el fulgor del alba

que creo, que vivo, que me siento lleno el pecho.

Y miro hacia adelante y río porquesí,

que tengo, que voy, que ando, que descalzo sobre el agua.


Entonces vuelve la constelación opaca del miedo

a inundar el territorio que tenía bandera plantada por mi brazo y antorcha

a oscurecer todo lo que había de porquesí;

y yo, yo. Me quedo como una bolita prendida fuego.

jueves, 21 de mayo de 2009

Cerro no cerro




El para siempre, lo eterno, lo excesivo,

pasarse de rosca, dar la vuelta al mundo,

romper el eje de la tuerca y doblar la pinza

por la fricción del calor a punto de generar la chispa de la vida.


Demasiado y mucho no parecen adjetivos sino

sujetos inmaculados que dentro mío comen

y hacen picnic y pumper nic. Fantasmas y

zombies a partir de las sombras saurias verdes que traía desde la infancia.


Estar sin el registro tiempo, ser atemporal es

precisamente la ecuación que precisa la inexistencia,

el eterno es nadie, remembranza de la imposible

guardado en el corazón entre algodones suaves como un recuerdo de cajita de cristal.


¿Cómo no agotarse luego, ni entrar en pánico

sintiendo que se va justo en esa dirección?


Para ello, mejor dejar todo y pasearse desnudo

por el cerro de los siete colores.

miércoles, 20 de mayo de 2009

Cuerdo/a





Ya no tengo mentiras para entregar

ni un cascajo de tiempo para dinfundir,

no tengo evidencias del que fui

pero evidentemente también me olvido del porvenir.


Odio a quienes odio sin importar

y que farfullen y se ausculten en una bóveda de silencio

los que se sientan tocados sin quererlo,

pues. Ya tampoco quiero tocar a nadie.


He dicho bastante en la caja de resonancia

como para andar olvidando a los cuatro vientos

por cada esquina que paso en la mirada distraída

con el torpe peatón que no mira a los costados.


Me olvido y opero sin darme cuenta,

mi sonrisa y hasta mi ojo paranoico sin estenoicopía

han muerto bajo velos de sangre para nada mística

con unos arañazos que le daba a la pared por no entregarle a la guitarra lo que ella quería de melodía.


Que mi verso sea largo no me importa,

que la poesía no sea poema, un bledo

resbala un pito que sea largo tampoco importa

como también ignora un culo sin profundidad.


Que se achanchen, que se duerman

los que quieran el panqueque de margaritas amarillas

que primero pasen por caja y saquen su ticket

sin amarillentismos solicitamos al público.


Que me encuentre un boleto roto de hace dos años en un pantalón,

que soy sucio, ruin y pechador

que le quité el pan a la vieja, ya era, si, si. Ya era.

Sola, fané y descangayada.


Toda una noche sin dormir, un vino sin tomar,

mucha narcolepsia por venir sin psicotrópicos, claro que no:

el tutor de la racionalidad, el heredero de Platón y la filosofía occidental,

y no solo! Porque también vivas por la oriental.


El heredero cobarde de todas las fotografías que no fueron,

de todos los pensamientos querellados en utopías

por el juzgado universal

de la falta.


Bienvenido quien seas, apurate que a punto está de incendiarse la cuerda del instrumento.