¿cómo se regresa?
cuatro amaneceres luminosos enredado
en tu pelo, en las manchas de tu cuero,
en tus puntos marrones: guías de mis manos,
cuatro amaneceres son muy poco,
porque todo es poco, aunque sea mucho,
sobre todo si son esos amaneceres.
¿cómo se regresa?
cuatro anocheceres al pie de tu mirada vitreaux,
en tu voz contemplativa, dulce, honda, pacífica,
en tu gesto femenino de amor: mi devoción,
cuatro anocheceres son pocas lunas redondas,
para este hambre que tengo de tu sueño,
de tu intimidad, de tus rinconcitos.
¿cómo se regresa?
del mar que nos miraba besarnos, con ojos
de espuma orillesca, de los perros amigos
que nos enviaba la arena para enlazarnos
en la caricia de la luz y la sombra de un segundo,
¿cómo?
del besarte a antojo y destajo, del nombrarte
por tus orejas y el abrigarte por la sonrisa,
de la risa fácil, la inventiva,
de todo ese mundo.
¿cómo se regresa?
No hay comentarios:
Publicar un comentario