Tu animal pelaje oscuro, cuero grueso y patas
largas para caminarte esa panza de bailarina
de mis acordes rasgos y uñas de estremecedor;
eso y otras cosas, como tu temperatura trascendida
al termómetro y tu viajero al centro del sol tierra
hundido y enlacavado por las líneas de la espalda esa
que tuyas ellas, tan tuyas sin embargo parecen trazar
el tiempo anidado y andado: el que no alcanza.
Tu sinuosidad carnal, tu efecto: que me mastiques,
que me desarmes y luego reconstruyas la playa y
la reposera, el agua hirviendo y una duna desde
donde ser arcaicos como una suma, toscos y torpes
en ese va y viene. Tu mirada persistente de mujer
amando a un hombre que violenta a la noche,
le quita el sueño como ladrón impúdico para poder
compartir con vos ese clima tan nuestro, de la
madrugada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario