viernes, 20 de junio de 2008

Momento - Lento -





Podría hablar de vergas duras


en un lenguaje asequible,


pero la verdad es que no tengo ganas


de hablar así tan a ligera


de tetas, conchas y culos.


Prefiero ocultarlo todo,


hacerlo lejano.


No divertir a nadie tan gratuitamente,


aunque resulte tan redituable


y gratificante,


aunque sea la causa del vitoreo,


del apabulle, del aplauso.


Pertenezco quizás a otras generaciones,


en estos estados de ánimo


y quizás prefiera hablar


de la movilidad de los dedos


- tema que me sensibiliza notablemente -


y de organos sexuales estimulados


por determinadas pasiones


que difícilmente sean explicables


por el lenguaje.


Será que la visión que vivo


está cargada de metáforas,


que en los ojos se me trasulcen


colores,


olores,


tus manos,


tus besos.


Pero no. No es


el momento de divertir


hablando de vergas duras,


sino de besos tiernos.

No hay comentarios: